José Francisco Quispe, presidente del barrio San Francisco de Langaza, asumió recientemente el cargo de presidente del barrio, un rol que le fue otorgado por sus vecinos. Aunque su experiencia en la directiva no es nueva habiendo sido tesorero en la gestión anterior, Quispe se encuentra ahora liderando la comunidad con un objetivo claro: reactivar el barrio, que en los últimos años ha experimentado un notable decaimiento.
En sus propias palabras, Quispe expresó con orgullo que «estoy muy contento de pertenecer a mi querido barrio. Por eso mismo, decidí ponerme al frente, para ver qué se puede hacer para mejorar nuestra situación».
Los Desafíos Viales
Uno de los mayores retos que enfrenta San Francisco de Langaza es la situación de la vialidad. La carretera que conecta el barrio con otras áreas está deteriorada, afectando gravemente el tránsito diario. «La vía está bastante deteriorada. En el pasado, las administraciones anteriores nos ayudaron bastante, pero hoy en día no se ha hecho ningún mantenimiento», indicó el presidente del barrio.
Quispe recordó que, hace aproximadamente quince años, la vía fue asfaltada, pero debido a la falta de mantenimiento, hoy se encuentra en malas condiciones. «Nosotros antes teníamos una carretera empedrada, y aunque el asfalto mejoró, la falta de cuidado y mantenimiento hizo que la situación empeorara», señaló.
Buscando Soluciones
El presidente de la comunidad expresó su compromiso por gestionar las soluciones necesarias. «Ahora, con esta nueva directiva, vamos a buscar la ayuda de las autoridades para ver si logramos mejorar la situación de nuestra carretera», dijo Quispe, quien también subrayó que, a pesar de las dificultades, en la administración anterior se realizaron esfuerzos para obtener apoyo del municipio, incluso reuniéndose con el alcalde Juan Paul Pacheco.
«Vamos a seguir tocando puertas», agregó Quispe. “Nos hemos reunido con el alcalde, y él nos ha ofrecido muchas obras, pero aún falta mucho por hacer, y no vamos a descansar hasta lograrlo».
La Participación Vecinal: Un Reto Pendiente
Sin embargo, uno de los mayores obstáculos no es solo la infraestructura, sino la falta de participación de los vecinos. «Antes la gente salía a las mingas, se preocupaba por el barrio, pero en los últimos años no hemos tenido la misma respuesta», comentó Quispe. Para él, este es un punto crucial a resolver, ya que la unidad de la comunidad es vital para el desarrollo del barrio.
En cuanto a la seguridad, Quispe mencionó que, gracias a los esfuerzos comunitarios y a la implementación de alarmas vecinales, el barrio ha logrado mantener un ambiente seguro. «No hemos tenido problemas grandes. La gente se cuida entre sí, y eso es positivo», indicó.
Hacia el Futuro
Finalmente, Quispe abordó el tema de la pertenencia del barrio a la Federación de Comunidades Salcedenses (FECOS), un trámite que la directiva anterior no pudo concretar. «Hoy, al estar al frente, veré qué pasos seguir para asegurar que nuestro barrio forme parte de esta importante organización», concluyó el líder barrial.