Capacitación y prevención: un compromiso comunitario
Desde el 2023, la parroquia de Panzaleo ha sido parte de un proceso de capacitación liderado por la Cruz Roja Ecuatoriana y el GAD Parroquial. A través de la conformación de brigadas comunitarias, los habitantes han adquirido conocimientos en primeros auxilios, evacuación y gestión de riesgos.
Las sesiones de formación incluyeron la creación de planes familiares de emergencia, el uso de mochilas de emergencia y la implementación de rutas de evacuación en caso de una erupción del volcán Cotopaxi. “El objetivo principal es generar capacidades y recursos a nivel local, para que las comunidades sepan cómo actuar en caso de un evento adverso”, explicó Sabina Ortiz, técnica nacional de gestión de riesgos de la Cruz Roja Ecuatoriana.
Un país vulnerable, una comunidad preparada
Ecuador es un país expuesto a múltiples amenazas, tanto naturales como antrópicas. Entre los principales riesgos identificados están las erupciones volcánicas, inundaciones, incendios forestales, sismos y sequías. En el caso de Panzaleo, la amenaza más latente es la actividad del Cotopaxi, así como la cercanía de la carretera E-35, que incrementa la posibilidad de accidentes de tránsito.
Ante este panorama, Tania Cunalata, coordinadora provincial de gestión de riesgos de la Cruz Roja en Cotopaxi, destacó la importancia del fortalecimiento de capacidades. “Buscamos que la comunidad tenga una respuesta efectiva en caso de emergencia, ya sea en sus hogares o a nivel comunitario”, indicó.
Simulacros para reforzar el aprendizaje
Como parte del programa de preparación, se han realizado simulacros de evacuación y atención de primeros auxilios. Estos ejercicios han permitido evaluar el nivel de respuesta de los brigadistas, identificar posibles falencias y reforzar los conocimientos adquiridos.
Los participantes han recibido equipamiento esencial, como botiquines de primeros auxilios, mochilas de evacuación, tablas de trauma y collarines. Además, se ha promovido la instalación de sirenas comunitarias para alertar a la población en caso de una emergencia real.
Impacto en la comunidad y proyección a futuro}
Actualmente, la brigada comunitaria de Panzaleo está conformada por 27 personas, quienes han aplicado sus conocimientos en distintos escenarios, como accidentes de tránsito y emergencias domiciliarias. “Gracias a la capacitación, hemos aprendido a reaccionar de manera inmediata y adecuada”, comentó uno de los brigadistas.
El compromiso con la seguridad comunitaria no se detiene. La Cruz Roja y el GAD Parroquial han anunciado que continuarán con nuevas capacitaciones y fortalecerán el trabajo en otras parroquias de la provincia. “La preparación es lo más importante, porque cualquier momento puede suceder una emergencia”, concluyó Cunalata.
