
Tres niños de una escuela fiscal clasifican a la final internacional de lógica matemática en Perú y reafirman que el talento ecuatoriano no tiene límites.
Unidos por la pasión, impulsados por la mente
Salcedo se viste de orgullo. La comunidad educativa de la Unidad Educativa Alejandro Dávalos Calle celebra con júbilo la clasificación de tres de sus estudiantes de primaria a la final internacional del concurso de lógica matemática “Descubrimiento Matemático”, organizado por el Grupo MATE en Lima, Perú.
Los pequeños protagonistas que, entre 163 participantes a nivel nacional, lograron destacarse por su ingenio y dedicación. Ahora llevan consigo no sólo los sueños de su escuelita, sino los de todo un cantón que ve en ellos un reflejo de esperanza y futuro.

El poder del conocimiento
La emoción se siente en cada rincón del plantel. Las palabras de la rectora, magíster Nancy Fonseca, resumen el espíritu de esta hazaña: “Estos niños son mucho más que estudiantes, son exploradores del universo de los números y las ideas”. La institución, ubicada en una de las zonas más populares del cantón, ha construido una base sólida de formación, incluso en medio de recursos limitados.
El evento internacional, que tendrá lugar en el Colegio Parroquial Apóstol San Pedro en Cañete, Perú, el próximo 17 de mayo de 2025, reúne a niños de Bolivia, Perú y Ecuador. Para estos jóvenes talentos, el viaje representa no sólo una competencia, sino una experiencia transformadora de intercambio cultural y académico.
Docentes como faros

“Son nuestros faros, los que nos han guiado con pasión y paciencia”, dice emocionado Maicol Arias durante su intervención. Se refiere a sus maestros, entre ellos el Magíster Paúl Tipanluisa y la docente Rocío Sánchez Santana, quienes han estado al frente del proceso formativo de los estudiantes. Sus palabras retumban como un agradecimiento profundo al trabajo silencioso de los educadores que han sembrado curiosidad, han cultivado el pensamiento lógico y han acompañado cada paso del camino.
Un logro familiar
El acompañamiento de las familias ha sido vital. Fernando Arias, padre de Maicol, no puede ocultar su emoción. “Me siento muy orgulloso. Es el fruto del esfuerzo de mi hijo, de su pasión por resolver problemas. Nosotros como padres estamos cubriendo los gastos para acompañarlos, y lo hacemos con alegría”.
Aunque parte de los costos del evento son cubiertos por los organizadores peruanos, los pasajes y la logística del viaje corren por cuenta de los padres. A pesar de ello, la motivación es más fuerte que cualquier obstáculo económico.
Matemáticas que construyen futuro
El concurso internacional no sólo se centra en fórmulas y ecuaciones. Está diseñado para promover el talento matemático desde temprana edad, fomentar la amistad entre países hermanos y elevar la calidad de los concursos académicos en la región. Ecuador participa con entusiasmo, representado no por grandes colegios privados, sino por estudiantes de una institución fiscal que hoy desafían las estadísticas.
El temario abarca desde aritmética hasta teoría de números, pasando por geometría y física básica, todo adaptado al nivel de primaria. La clasificación de los niños salcedenses evidencia no sólo su inteligencia, sino también una preparación seria y comprometida.
Una comunidad celebrando
Este logro no es sólo de los niños, ni siquiera únicamente de la escuela. Es una victoria de Salcedo, de sus barrios, de sus padres y de todos quienes creen que el conocimiento puede transformar realidades. “Este viaje no es sólo una final internacional, es una metáfora del esfuerzo, del amor por aprender y de la capacidad infinita de nuestros niños”, expresó emocionada la rectora Fonseca.
Desde lo profundo del Ecuador, estos tres pequeños embajadores viajan al Perú no sólo a competir, sino a representar con dignidad a un país que vibra con cada paso que dan.